Su familia, su profesora, sus amigos de la infancia, una idol, un escritor y el pueblo donde vive... Reiji Kurose vivía “pasivamente” atado por todo eso. En su casa ya no están ni su abuela ni su madre ni su hermano, y Esemori le dice que encuentre a Nagi y se vaya del pueblo. ¿Hay esperanza en seguir vivo? ¿Habrá luz en un futuro? La historia de un chico y una chica que se conocen en el fin del mundo, que refleja una realidad “actual”, continúa en este decimoséptimo tomo...